miércoles, 12 de noviembre de 2008

PELOTA COMO JUGUETE



Por Camilo Requelme
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Ariel Arnaldo Ortega
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Este no es un “Burrito” cualquiera...

_”Ariel, hay dos posibilidades para probarte: Independiente o Boca…”
_”River”
_”Pero ahí no tengo contactos. Si querés, hablo en Boca…”
_”Quiero jugar en River”


Así empezó esta larga travesía de Ariel por el fútbol. Allá por el año 89, después de quebrarle la cintura a varios jujeños con sus gambetas, decidió emigrar a Buenos Aires.

Uff que maravilla de jugador, gambeta deliciosa, postura elegante, ligereza mental y la magia intacta que lo destacó a lo largo de su carrera; quisiera pedir disculpas, porque si hay algo que lo destaco al burrito fue su amor incondicional por el equipo que lo vio nacer. El 14 de diciembre de 1991 quedará marcado a fuego en el corazón de todos los riverplatenses, pues con tan sólo 17 años debutó frente a Platense. De ahí en más, comenzó un amor incondicional que nada sabe de adicciones, peleas ni rencores. Porque, como dice el tango, “siempre se vuelve al primer amor”,llegará aquel día en que se canse el destino y, como toda novela de amor, el romance quede sellado.
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Ariel nació el 4 de marzo de 1974 en General San Martín, Provincia de Jujuy.De familia humilde pero con una visión transportadora, esa, que tiempo después lo llevara a debutar en River Plate, de la mano de Daniel Passarela, una persona clave en su vida.

Con el equipo millonario gano entre otras cosas la Copa Libertadores del año 96`. Al año siguiente emigro a Europa para jugar en Valencia, Sampdoria y en el año 2000, ficho para el Parma AC, en donde pudo tener continuidad y demostrar un despliegue asombroso. Alli el burrito se adjudico una Supercopa de Italia y una copa UEFA. A pesar de los logros decidió regresar a River y más de lo mismo, figura indiscutida y clausura 2002 en el bolsillo.

Tampoco vale olvidarse de su gran paso por la selección Argentina, con tristesas y alegrías. Su flash en Fenerbahçe, de Turquía. Su campeonato en Newell´s old Boys, su vuelta a River y su presente en Independiente de Rivadavia jugando el Nacional B.

No me gusta aburrir y me encanta simplificar. La dirigencia de River junto al Cholo simeone le deben un perdón a la redonda, nunca van a entender que Ariel jugo siempre enfermo y le dio ventajas al fútbol, esa lucha que hasta hoy continua.

Yo soy uno de los creen en los sueños y Ariel no deja de soñar en estar sano junto a su familia y volver a river. Lo dejo en minúscula porque los fanáticos millonarios aseguran que este mago posmoderno no es de River: es River…

1 comentarios:

Atletico Laboulaye dijo...

aplausos camilo: plac-plac-plac !